En una jornada marcada por la escalada de violencia, Israel llevó a cabo dos ataques aéreos en Líbano que resultaron en la muerte de cuatro importantes líderes palestinos, incluida la del comandante de Hamás en Líbano, Fatah Sharif Abu Al Amin. Hamás informó que su líder murió junto con su esposa, hijo y nuera en un ataque que tuvo lugar en el campo de refugiados de Al Bass, en el sur del país. El comandante Fatah Sharif murió al amanecer en una operación que calificamos de asesinato criminal, lamentó la organización islamista en un comunicado, donde también acusó a Israel de haber atacado deliberadamente a toda la familia. Ante esto, en un ataque separado en Beirut tres dirigentes del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) fueron asesinados cuando un bombardeo israelí alcanzó un edificio en el barrio de Cola. Las víctimas fueron identificadas como Muhammad Abdul Aal, jefe de seguridad militar del FPLP; Imad Awda, comandante militar en Líbano; y Abdul Rahman Abdul Aal, líder destacado del Frente. Este ataque es el primero de Israel contra la capital libanesa desde que comenzaron las hostilidades con Hezbolá hace casi un año. El Ejército israelí, que hasta ahora ha guardado silencio sobre estos ataques específicos, informó en un comunicado de otros bombardeos en el área de Bekaa, dirigidos principalmente a posiciones de Hezbolá. Los recientes enfrentamientos han dejado al menos mil muertos y más de 6.000 heridos, mientras que un millón de personas han huido de sus hogares, según el Gobierno libanés. La ONU reporta que miles de refugiados, en su mayoría niños, han cruzado a Siria en condiciones precarias. La comunidad internacional sigue con preocupación por los eventos, mientras se teme que la violencia continúe escalando en la región.
Los intensos bombardeos israelíes en Líbano han dejado un saldo trágico de 356 muertos, incluidos 24 niños, y más de 1.240 heridos. Este lunes, el ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos contra más de 1.100 objetivos vinculados al movimiento islamista Hezbolá, en respuesta a las tensiones crecientes en la región. Entre los ataques más destacados se encuentra uno en Beirut, dirigido contra Ali Karake, un comandante de Hezbolá, aunque no se ha confirmado su paradero tras el ataque. En un video publicado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a los ciudadanos libaneses a mantenerse alejados de laszonas peligrosas mientras las operaciones militares continúan. Por su parte, el primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció lo que considera unplan de destrucción orquestado por Israel, haciendo un llamado a la ONU y a las naciones influyentes para que intercedan y frenen esta agresión. Hezbolá, un actor político y militar clave en Líbano, ha mantenido un frente activo contra Israel desde el inicio del conflicto en la Franja de Gaza, apoyando a su aliado Hamás en la región.
En una jornada marcada por la escalada de violencia, Israel llevó a cabo dos ataques aéreos en Líbano que resultaron en la muerte de cuatro importantes líderes palestinos, incluida la del comandante de Hamás en Líbano, Fatah Sharif Abu Al Amin. Hamás informó que su líder murió junto con su esposa, hijo y nuera en un ataque que tuvo lugar en el campo de refugiados de Al Bass, en el sur del país. El comandante Fatah Sharif murió al amanecer en una operación que calificamos de asesinato criminal, lamentó la organización islamista en un comunicado, donde también acusó a Israel de haber atacado deliberadamente a toda la familia. Ante esto, en un ataque separado en Beirut tres dirigentes del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) fueron asesinados cuando un bombardeo israelí alcanzó un edificio en el barrio de Cola. Las víctimas fueron identificadas como Muhammad Abdul Aal, jefe de seguridad militar del FPLP; Imad Awda, comandante militar en Líbano; y Abdul Rahman Abdul Aal, líder destacado del Frente. Este ataque es el primero de Israel contra la capital libanesa desde que comenzaron las hostilidades con Hezbolá hace casi un año. El Ejército israelí, que hasta ahora ha guardado silencio sobre estos ataques específicos, informó en un comunicado de otros bombardeos en el área de Bekaa, dirigidos principalmente a posiciones de Hezbolá. Los recientes enfrentamientos han dejado al menos mil muertos y más de 6.000 heridos, mientras que un millón de personas han huido de sus hogares, según el Gobierno libanés. La ONU reporta que miles de refugiados, en su mayoría niños, han cruzado a Siria en condiciones precarias. La comunidad internacional sigue con preocupación por los eventos, mientras se teme que la violencia continúe escalando en la región.
Los intensos bombardeos israelíes en Líbano han dejado un saldo trágico de 356 muertos, incluidos 24 niños, y más de 1.240 heridos. Este lunes, el ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos contra más de 1.100 objetivos vinculados al movimiento islamista Hezbolá, en respuesta a las tensiones crecientes en la región. Entre los ataques más destacados se encuentra uno en Beirut, dirigido contra Ali Karake, un comandante de Hezbolá, aunque no se ha confirmado su paradero tras el ataque. En un video publicado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a los ciudadanos libaneses a mantenerse alejados de laszonas peligrosas mientras las operaciones militares continúan. Por su parte, el primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció lo que considera unplan de destrucción orquestado por Israel, haciendo un llamado a la ONU y a las naciones influyentes para que intercedan y frenen esta agresión. Hezbolá, un actor político y militar clave en Líbano, ha mantenido un frente activo contra Israel desde el inicio del conflicto en la Franja de Gaza, apoyando a su aliado Hamás en la región.